El behaviorial targeting permite mayor relevancia en los anuncios gracias a un control de tus actividades en la web. Donde las grandes empresas para evitar problemas plantean ahora mismo medidas de autocontrol, que parecen dejar claro que el futuro de la publicidad y el marketing en medios digitales pasará por el permiso de marketing.
Hace unos días leía en el NYT acerca de los movimientos que desde el Congreso de los EEUU se están promoviendo para regular las prácticas que comentas en el post. El NYT ponía como ejemplo una empresa que había desarrollado un hardware que se instalaba directamente en las redes de los proveedores de Internet con la finalidad de hacer tracking y personalizar anuncios.
A mí la publicidad personalizada me parece muy bien. No me cabe en la cabeza que a alguien no le guste que la publicidad esté adaptada a tus gustos. Pero hay una cosa clara, la información previa a la captación de datos y el derecho de cancelación. Eso son reglas inevitables para generar confianza.